domingo, 26 de febrero de 2012

Aprendizaje de los últimos días…

El tiempo ha continuado su paso, aunque las cosas han cambiado y afortunadamente todo es un poco mejor de lo que solía ser. Olvidé, incluso, un par de malos hábitos que “sin querer” habían surgido, supongo que más bien eran reacciones a la atmósfera tan nefasta de la que estaba rodeado. En fin, hay ciertas ideas, experiencias y aprendizajes que me han quedado más claro en estos últimos días:

  • Un “Te quiero” y “Un te extraño” son palabras extremadamente poderosas, más de lo que alguna vez pude imaginar. Pero me di cuenta que como todas las palabras, si no hay hechos detrás de ellas simplemente se desvanecen con el viento.
  • La increíble cantidad de oportunidades que hay “allá afuera”, a veces tan inmensa que es abrumador. Oportunidades para conocer/estar con alguien, para hacer cosas, para hacer dinero, y un montón de cosas más. Obviamente, las oportunidades están pero requieren esfuerzo y trabajo.
  • La importancia de leer, de estar rodeado de libros y de letras. En ocasiones cuando uno necesita “respuestas” o al menos “preguntas más claras” los libros son la mejor herramienta. Y no, no estoy hablando de libros de “autoayuda” sino de literatura de verdad.
  • El ejercicio sigue siendo mi mejor amigo. Siempre me levanta en mis momentos de debilidad y me motiva a exigirme más, mejor “droga” no hay. Por si fuera poco, estoy alcanzando uno de los mejores estados físico de los últimos 4 años.
  • Salir de mi trabajo fue solo el primer paso de un proceso para reajustar objetivos y darle dirección a mi vida. No han sido del todo fáciles estas primeras semanas del año, a veces me da cierta ansiedad por “no estar haciendo algo productivo”, pero la realidad es que ya no me basta solo hacer por hacer, necesito hacer algo verdaderamente de acuerdo a mis intereses y gustos. En eso estoy…

La realidad es que estoy tratando de disfrutar y de aprender en estos días, días en que viejas ideas parecen ya no tener el sentido que solían tener. Necesito hacer un par de cambios más, mudarme de mi actual casa es ya casi una necesidad más que un gusto, aunque también hay un par de situaciones que me han aplazado esto.

Por otro lado, me siento más fuerte y más maduro; cada vez bailo más, aunque lo haga solo, cada vez hablo y sonrío más aunque no haya palabra y sonrisa de vuelta, y hay muchas cosas que hago, y solo por el simple hecho de hacerlas me hacen sentir feliz (mi viaje a Playa del Carmen dejó muy buenas experiencias).

Dejo un poco de música electrónica para relajar, tengo que bailar esto algún día (no muy lejano) en alguna playa de Brasil o Sudamérica.