jueves, 29 de octubre de 2009

Adios ER...


Ayer, después de 15 años llegó a su final la serie que más he seguido. Mmm, ahora que lo pienso, comencé a ver esta serie en algún punto de la prepa, principalmente por culpa de mi jefa, y como la empecé a ver en el canal 4 o algo así, pues casí la pude empezar a ver desde el principio (como me da risa ese desfase de años que tiene la televisión abierta, aunque creo que últimamente han mejorado bastante) y pues me empecé a picar y la seguí y la seguí, hasta que la quitaron del canal cuatro pero, meses después, al fin llegó el cable a mi casa y pude verla nuevamente, aunque tuve que pasar por ese proceso (no tan padre) de readaptación de las voces en español del canal 4 a las voces originales en inglés. (a veces como que si saca de pedo eso de que cambien tanto las voces... uno de los ejemplos más dramáticos es el de los Simpsons).



El tema de la serie pues no es tan díficil de descifrar tras el título ER: Emergency Room. Ya saben, chingos de madres de médicos y cosas de hospital, pero bueno, al final lo interesante es como profundizaban en los conflictos de cada personaje y como iban saliendo unos personajes para ser reemplazados por otro sin que eso afectara a la serie, digo, obviamente hubo personajes más memorables que otros pero los escritores de esta serie de verdad supieron entrelazar adecuadamente las historias, tanto, que incluso en estos última temporada lograron que todos los personajes principales salieran en al menos un capítulo.

Y finalmente, lo que hizo que me gustara esta serie fue la manera en la que mostraban el lado humano de las situaciones que presentaban. No sé, como que siempre había cierta carga de emociones, que me conectaba con varias de las historias de la serie. Es un poco difícli de explicar, pero de verdad, fue una buena serie, de esas que me deja pensando en que ocuparé esa hora que dedicaba los miércoles en los últimos años, ja. Así que si pueden échenle un ojo en algún domingo de flojera o algo así.

Y ustedes dirán, ¿este güey es un adicto a la televisión? pues no... la verdad soy bien huevón para seguir series, no recuerdo haber visto LOST (todos hablaban mucho de ella hace no mucho tiempo), mi jefa es la que me platica de vez en cuando de CSI, siempre tengo que robarle el control de la tele a mi hermana para quitar Grey's Anatomy, jaja; Dr. House, me parece cagadona, pero como que nomás no me ha motivado lo suficiente para incluirla en mi horario; Heroes, mmm, parecía interesante pero creo que la pasaban los viernes en mal horario; de los Soprano de vez en cuando me aventé uno que otra serie de capítulos pero creo que ni una temporada completa, aunque si vi el último capítulo y estuvo muy raro; The OC, salían viejas buenas, pero resultó ser una mamada. Pero bueno, por ahí, dos de las que han ganado un poco mi atención son la de Bones y la de Lie to me, ésta última me está gustando bastante por toda esa onda de su análisis contra mentirosos, pero bueno, ya veremos si en verdad se rifa.

Pasando a otros temas, como ya está bien cerca el Halloween pues les dejaré este videito que está bastante bueno y la canción también (Pet Sematary), es del mero punk del de antaño:




Y una sugerencia para su disfraz si es que de verdad quieren espantar:



Como pueden darse cuenta, la onda más que nada, es concentrarse en el rostro y el escote para tener éxito con un disfraz de este calibre.

jueves, 15 de octubre de 2009

Cuba: Hermosas Playas y el Desencanto del Socialismo...

Aunque ya me había tardado en escribir del viaje a Cuba, debido a que no había descargado las fotos principalmente, he aquí un poco de lo acontecido y lo experimentado en aquella Isla.

Llegué alrededor del medio día al aeropuerto internacional más importante de Cuba, que es el aeropuerto José Martí. Inmediatamente que bajé del avión sentí ese típico calor húmedo de los lugares tropicales... ah que rico es sentir ese golpe. De ahí pasé a la aduana y me dirigí a recoger mi equipaje, no sin antes, responder un cuestionario de salud por lo de la influenza. Lo interesante de esta parte fue descubrir que en las bandas transportadoras había circulando perros policía para oler las maletas, y por culpa de mis perros me retuvieron como por una hora, jaja, ¿porque por culpa de mis perros? pues porque de alguna manera las maletas que traía habián estado en contacto con ellos y pues los perros siempre se detienen a olfatear aquello que ha estado en contacto con otros perros por más entrenados que estén para detectar drogas, entonces pues que me revisan todo el equipaje para ver que traía, además de tomar todos mis datos y todo eso. Ni pedo.
Una vez libre, localicé a la gente que me iba a llevar a mi primer destino, Varadero. El transporte era una camioneta más o menos nueva, conducida por un señor de edad avanzada que fue platicando durante todo el viaje de algunos aspectos de la isla: tipo de cambio, transporte (Me daba risa que siempre que pasaba un carro gringo antiguo nos decía que modelo era), inversíon extranjera en Cuba, así como presentarnos todos los lugarse que íbamos atravesando, que en genreal eran puras provincias rurales, donde parecía no haber nada o muy poco movimiento. A la mitad del camino hicimos una escala para tomar unas piñas coladas en la carreteras, que resultaron estar bastante buenas, y como podías servirte todo el ron que quisieras para mezclarlo con la piña colada, pues a los veinte minutos yo ya andaba medio pedón, jaja. En general, estuvo ameno ese viaje, lo que si me desesperó un poco fue que el ruco estuvo manejando a 60 km/h en la carretera casi todo el tiempo.

Las Piñas Colada de la Carretera
Pero bueno, llegamos a Varadero, y nos repartieron en nuestros respectivos hoteles a los que veníamos en la camioneta (puro mexicano, 5 en total... a 3 nos tocaba en el mismo hotel, los dos que quedaron en mi hotel era una pareja, mamá e hijo). El Hotel en el que me quedé me sorprendió bastante, según yo me tocaba en un hotel 3 estrellas, y finalmente resultó que era de 4, y pues la neta estaba muy chingón.

La playa desde mi cuarto



De Varadero, definitivamnete lo más chingón son las playas: arena blanca, mar azul turquesa y olas muy tranquilas. Un lugar bastante padre como para ir a descansar. Los primeros días me la pasé en el puro mar y en la alberca, que también estaba muy chingona. Obviamente, le di la vuelta a todo Varadero pero solo para descubrir que es prácticamente una colonia de hoteles, con uno que otro centro comercial medio desierto (definitivamente nada espectacular) y algunos restaurantes. En realidad, es un lugar 100% dedicado al turismo e incluso el contacto con cubanos, en su mayor parte, no pasa de la gente que te atiende en el hotel.




Atardecer en Varadero

En las noches, el hotel tenía su "antrito", y se armaba buen desmadre, especialmente una vez que llegaron un grupo de canadienses, y pues como todo el día había barra libre, ya se imaginaran el desmadre que se armaba, jaja. En Varadero hay bastantes turistas internacionales principalmente canadienses y europeos.
Después de los días de playa, alberca y sol, vino La Habana. Lugar totalmente diferente, al muy tranquilo Varadero, en primer lugar porque es ya una ciudad, y en segundo lugar, porque es ahí donde uno aprecia el socialismo cubano en su máximo esplendor. Inicialmente iba a estar en un hotel que también me sorprendió, pero me terminaron cambiando quesque por problemas de aire acondicionado a otro, que no estaba mal, también era de 4 estrellas pero no se cmoparaba con el primero, jaja.


laza de la Revolución




Y pues, una vez que salí, del hotel comencé a enfrentarme con el ambiente de la Habana para los turistas. En Varadero, realmente no había tenido que hacer uso de dinero pues el Hotel era todo incluido y solo compré algunas cosas, pero en la Habana ahí si tuve que usarlo, solo que hay un pequeño detalla y ese es que existen 2 monedas en Cuba, prácticamente una exclusiva para turistas, pues nomás no me gustó para nada. Y si, ya había leído de eso en internet, pero es que ya que lo vives es que sientes como esa dualidad de monedas se convierte de una forma de segregación, pues obviamente la moneda de los turistas (Pesos Convertibles o CUC's) es demasiado cara para los cubanos que utilizan regularmente el peso cubano, que es con lo que les paga el gobierno. Definitivamente esa parte no me gustó. (Un peso covertible cuesta alrededor de 16 MXN, mientras que el peso cubano son como 60 centavos MXN).




Por otro lado, en el momento en el que te descubres como turista en la calle, brotan por todos lados güeyes que quieren hacerla de guías y todo eso. Al primero y al segundo como que se les tolera, pero del tercer en adelante se va acabando la tolerancia.

Y en la Habana, es donde realmente uno puede conocer la realidad del pueblo cubano. Por un lado, te encuentras con una cantidad importante de edificios históricos y de monumentos que glorifican la Revolución, pero potr otro, ya que uno plática con la gente, uno se da cuenta de que hay cierto hartazgo sobre los preceptos socialistas sobre los que se rige la Isla. Entre otras cosas se me quedó muy grabado el ver la gran cantidad de propaganda autoproclamadora del Estado, decenas de anuncios "espectaculares" en las carrerteras y en las avenidas con aluciones a la revolución; el hecho de que tanta gente me dijera que de 11 millones de cubanos, 6 millones son policías; ver una tarjeta de raci0namiento que es por medio de la cual la gente puede adquirir una cantidad fija de víveres mensualmetne; saber que la gente no puede salir de su país ni mostrar públicamente su antipatía por el régimen so pena de perder su libertad. Obviamente también hay gente que glorifica al régimen, pero como que nomás no les compré la idea viendo todo lo anterior.




Calles de la Habana

Por otro lado, en La Habana se presenta la mayor variedad de lugares para salir de fiesta, así como de espéctaculos. Además de poderse encontrar con lindas y muy guapas cubanas en varios de esos lugares, aunque bueno he de decir que ante los comentarios que mucha gente me había hecho yo esperaba que La Habana estuviera inundada de cubanas super buenas, pero no, no fue así, o sea, si hay, pero no como me habían platicado.


En fin, pues la conclusión es que como cualquier lugar, Cuba tiene muchas cosas interesantes, su historia, playas, música, mujeres.... pero es innevitable sentir esa confrontación política - económica de su sistema, tan diferente al que vivimos aquí y que afortunadamente nos da tantas libertades.