viernes, 7 de agosto de 2009

Una de las peores sensaciones...

Hoy recordé una de las peores sensaciones que cualquier persona pueda tener jamás, aunque afortunadamente para todos es solamente transitoria y depende más que nada de algunos factores como la resistencia al tiempo y distancia, pero sobre todo control mental, jaja... y no no es una carrera...


Pues la cosas está así más o menos, después de mi diario recorrido en el metrobús que, por cierto, hoy empezó más tarde por un ligero retraso en la salida del deportivo, me dirigí a la Glorieta de Insurgentes para ver a un amigo y, posteriormente, dirigirme al trabajo, al cual ya iba como con veinte minutos de retraso, ni modo, jaja...


Pues total, vi a mi cuate en el Sanborns de Reforma 222, y me fui ya con prisa con dirección al Metro Insurgentes. Ya en la glorieta de insurgentes que comienzo a sentir un gran movimiento en mi zona abdominal... y empiezo a decirme "no mames, que guey, hubiera pasado al baño al Sanborns...", jaja. Lamentablemente, el caminar de regreso al Sanborns, a pesar de que no estaba tan lejos ya no era viable pues ya iba tarde al trabajo, así que ni modo a apretar como si no hubier mañana. Llego al andén del metro y nada: "pínche metro, ahora que necesito no pasas", así que comencé a caminar en círculos y respirando profundamente... pttts, pinche clase de control mental que me aventé mientras al chingado metro se le ocurría pasar.

Al fin llegó el metro... cuatro estaciones y dos cuadras caminando me separaban de la oficina, que largo se hacía el traslado entre oficina y oficina, y mientras tanto, solo podría recurrir a ejercicios de respiración (como de embarazada, jaja) y, bueno, creo que aplique suficiente fuerza como para dejar un poco doblados los tubos del metro, jaja... Al fin llego a mi estación y casi casi corriendo salgo del metro (casi corriendo, porque correr implica quitar energía que se encuentra concentrada en otros puntos claves)... Camino hasta llegar a Eje Central y antes de cruzar que me agarra el alto para peatones, así que nuevamente a enfrentarme contra el tiempo. Se pone el siga y a caminar la última media cuadra que me separaba de mi edificio... Al fin llego al edificio, entro al elevador y de repente veo un letrero "fuera de servicio"... pues a subir por las escaleras cuatro pisos más mostrando una sonrisa que pretendía disimular la urgencia, al menos en cierto grado... al fin llego al segundo piso, y que llego al tan deseado destino con una sensación cuasi orgámica... ufff, que alivio... definitivamente, horrible pasar por momentos así done la necesidad y el tiempo apremia, y no hay un pequeño oasis que pueda hacer el paro...

Lo que más me da risa es imaginar como se ve uno, las caras que hace uno cuando uno se encuentra en situaciones así, jaja... Pero bueno, la naturaleza es la naturaleza, y lamentablemente no siempre es oportuna. Espero no vuelva a suceder en un buen tiempo porque, hijole es todo un reto enfrentarse a estas situaciones o ¿no?.

En fin, pues ahora no habrá video porque ya volvieron a poner el filtro de internet, así que pelucas con el Youtube, jaja... Pero estaba pensando en el video de 1979 de los Smashing Pumpkins... muy chingona canción, el aliviane total con esa canción... De hecho el fin de semana anterior ahí con mis primos hicimos como una reproducción light, de manera inconciente, de ese video en la realidad, cagado... pero bueno lo posteo en estos días...

5 comentarios:

  1. que cagado post jajaja, ni modo pinche Antorcha, por eso se llama CORRELE QUE TE ALCANZO!

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  2. Horrible estar en esa situación cabrón, jaja... y además te digo, el pinche metro no pasaba, jaja... pero bueno, al final llegue a la meta que es lo que cuenta, jaja...

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  3. No es cierto, di la verdad cabrón... hiciste de tripas corazón antes de llegar a la oficina!!! jajajaja

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  4. JAJAJAJA!! Que buen post!!
    Siempre Murphy anda esperando a que uno ande mal de la panza para que todo pase y pone a prueba el control mental (y de esfinteres, ja!)
    Espero ya estés mejor del estomago, jeje

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  5. Si, toda una prueba de concentración cuando la naturaleza llama en lugares o momentos inapropiados, pero bueno, esas experiencias se convierten en anécdotas sumamente divertidas, jaja...

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